Pesimismo Para Una Semana Que Comienza.

Mosa
Cuerpo

Voy  a darme un tratamiento de psicología inversa, para experimentar si me va mejor o por lo menos si cambian un poco los resultados, siempre adversos para nuestro México y los que aquí respiramos.

Domingo  y el fútbol  puro coraje me llegué  a preguntar,  por qué encendí el televisor.  Domingo más temprano  en el mercado, antes  la bolsa del mandado se copeteaba con setecientos pesos  en la actualidad ni  a la mitad; permítame decirle que es una bolsa mediana, como de 20 kg.

Domingo para llevar el carro a que por lo menos le enjuaguen el tanque al carro, con  15 litros de la verde y apenas sube una mendiga rayita del gasómetro y la poca que logré comprar no dura nada y hasta me pone a pensar en la expropiación petrolera y las monografías que me dejaban hacer en clase, de que sirvieron.

También el domingo la noticia del muerto en  la colonia, de oficio: policía, que me espero, si ni macana traigo (en el buen sentido del castellano). El domingo, antes los domingos eran verdaderamente domingos para el disfrute, desde que aparecía en familia con chabelo hasta que se metía el sol y aunque  que se nos cayera media dentadura con tanta cochinada que anunciaban, pero eran otros domingos.

Para cerrar el domingo se antojaba un bolillito sopeado en chocolate caliente y espumoso; la panadería cerrada, la asaltaron la tarde del sábado, hasta un canasto de pan se llevaron.

Para mañana comenzaré a pensar que será un día peor para que cualquier resultado obtenido tenga su  lado medio positivo.

 

 

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