Adios De Un Moribundo
Caminar en jueves tiene un sentir diferente, casi el fin de semana; creo ver más sonrisas en los rostros del andante. Los chamacos con sus uniformes más mugrosos por estar adelantada la semana; rostros radiantes ¡mañana es viernes! El transporte colectivo con música de rompe y rasga a todo lo que da el chillón; el operador, recién bañado con sus cabellos relamidos por la buena cantidad de moco de gorila que se unto antes de salir. El objetivo de éste diestro al volante, ligarse una buena secretaria. En el reloj, las 08:00 la hora del bizcocho, algo caerá.
Los comerciantes lavando su cachito de banqueta; las doñas trapeando el local para comenzar la vendimia. Las calles repletas de automóviles con su hombre encorbatado al volante, carro por cabeza a nadie se le ocurre traerse al vecino aunque se dirijan al mismo rumbo, él que se joda, es jodido no tiene nave. Que extraño parejas de policías de tránsito apostados en los accesos a las vías rápidas, nunca se les ve, hay que juntar para los útiles escolares.
La esquina ya luce su montón de gente ansiosa en espera del micro, esa que se va derecho y sube el puente para no atorarse en la construcción del camellón, proyecto que lleva años sin terminar; lo que nadie sabe que entre ellos ya subió la rata, uno atrás y dos adelante; habrá rebatinga por los bienes ajenos ¡Ojalá las balas no salgan en busca de alguna vida!
Dos calles adelante el metro, parece como si un gusano naranja enorme abriera sus fauces y vomitara organismos que al tocar tierra echan a corren por doquier. Por qué sale tanta gente, escapan, buscan y sus rostros fruncidos por el enojo solo tratan de seguir su camino. Un pasajero con los años en su espalda, de pasos lentos aferrándose al pasamanos forza sus corvas para empujarse hacia afuera, alcanza a comunicar: se acaba de suicidar un cristiano, se aventó al paso del tren…quien sabe en que estaría pensando solo él supo su cuento..
Adiós del moribundo.
Chis chas (Jesús González Leal comediante norteño)
Desde el lecho maldito en que agonizo
Mundo gacho te mando a la tiznada
Me ofreciste placeres y riqueza
Y al final me saliste con mamadas.
Como herencia te dejo mi amargura
Nunca tuve amistad
Puros cabrones
Nunca vi la verdad
Solo basura recibí
Por mis pinches ilusiones
Cuanta gente culera te compone
Pinche mundo, martirio del jodido
Donde somos iguales se supone.
Mas la triste verdad que me ha dolido
Es que pobres y honrados valen mierda
¡Y campeón! Es el rico hasta que pierda
Los gobiernos son pulpos de la gente
Y la ley Nos enchufa por parejo,
De mi parte los dos chinguen a veinte
Ya me voy de este mundo de pendejos.
Ya diviso la muerte que me llama
Muerte ojete costal de pinches huesos
Ya no sigas pelándome los dientes.
Ven por mí para ir a mi destino
Si es al cielo lo tengo merecido
Porque infierno es éste
pinche mundo corrompido.