Al Chester Que Yo Extrañaría...

David
Cuerpo

No puedo entender por qué la muerte de Chester Bennington causó tanto revuelo en los medios. Ni siquiera comprendo la supuesta nostalgia de la que se contagiaron muchos presentadores de música ni de aquellos que elogiaban al cantante con frases de “se fue un grande de la música". Lo único que observaba era una bola de nieve conformada por aquellos que querían estar en la jugada y ser parte de la noticia del momento. Y yo les preguntaría ¿Qué es lo que hizo Chester Bennington por la música o en qué vino a revolucionarla para ser merecedor del enorme cúmulo de nostalgia por su partida?

Recuerdo –y recuerdo muy bien– el surgimiento de Linkin Park en medio del apogeo del Nu Metal, aquél sonido que sedujo a pubertos de secundaria y uno que otro inmaduro que disfrutaba de sentir un toque de rudeza correr por sus venas pero sin llegar a los extremos, delimitado por momentos en los que se bajaban las revoluciones y seducían sus oídos poco experimentados con toques de sensibilidad entre gritos y una mezcla de rap. Para situarnos en la línea del tiempo: finales de los noventa y principios de los dos miles.

Hybrid Theory les abrió el camino para posicionarse rápidamente como referentes de un género que no tardaría en pasar de moda y desembocar en decadentes agrupaciones con tendencias emo o hasta pop metal (si se le podría nombrar así). One Step Closer, Crawling e In The End sonaron hasta el cansancio lo que restaba del año 2000 e inicios del 2001.

Tener un DJ en la agrupación no fue exclusivo de ellos, aunque sí un factor en común en aquellos años: Limp Bizkit, Crazy Town, Mushroomhead y Slipknot, por ejemplo. Posiblemente la inclusión de ese elemento determinó lo que sería la transformación del sonido de Chester y su pandilla a uno más comercial y digerible para el público que los llevó a prescindir de su pose de chicos rudos. Es más, no vayamos tan lejos para ejemplificar lo que les digo: finales de 2013 con A Light That Never Comes.

Entonces ¿Cuál es el valor de Bennington en la música? Espero que en su defensa no quieran argumentar que era el personaje idóneo para incrustarse en la voz de los decadentes Stone Temple Pilots una vez que Weiland fuera expulsado de la banda. Los ahora ya finados, no tuvieron punto de comparación y a pesar de que uno hizo su mejor esfuerzo, no pudo opacar ni hacerle sombra al otro.

Para mí –que me tocó crecer  y consumir el Nu Metal– la figura de Chester no es icónica ni tampoco tengo que fingir hipócritamente que fue un duro golpe emocional para mi nostalgia de años como estudiante de secundaria. Simplemente fue un intento para poder prolongar la vigencia del rock en un movimiento fallido que mostraba el declive del mismo en un futuro no muy lejano, devorado por el sonido de la música electrónica que se mezclaba en su sangre como un virus silencioso que terminó por infectarlo en su totalidad, permaneciendo ahí, en algún lugar en estado cataléptico.

Así que siendo honestos, si hubiera que sentirme triste por la partida de un Chester; sería el de los Cheetos.