El lujo para los millennials
Quien dice que los mexicanos somos un pais pobre e infeliz, si ya estamos haciendo colas y empeñando hasta la abuelita para comprar el nuevo IPhone X eso si aunque te lo saque en módicas cantidades y en abonos chiquitos. Pues la compañía de la manzanita ya anuncio que para noviembre de este año lo podrán tener a precios estratosféricos que van desde lo 23 mil 499 a los 26 mil 999 dependiendo de las características que presente el aparatito, pero con todo esto ¿Qué podrías comprar con estas cantidades?
6 años de viajar en metro
Con esa lana te alcanza para el equivalente a 4 mil 699 boletos del Metro, es decir, 2,349 viajes redondos. Imagínate, si existiera una tarjeta con la que pudieras abonar todo ese dinero, ya no tendrías que preocuparte por formarte en la taquilla del Metro en los próximos 6 años de tu vida godín.
12 comidas en el mejor restaurante de la ciudad
Al menos durante un mes o los 24 meses en los que estarás pagando un iPhone, podrías farolear en el restaurante más exclusivo de la ciudad, que incluso, ha estado entre los 100 mejores del mundo. Un menú del día -sin alcohol- en el Pujol te cuesta alrededor de 1,839 pesos por persona. Es más, hasta te sobra para la propina.
Vuelo redondo a Japón
Si puedes comprar un iPhone, ¿por qué ves tan lejos tu sueño de visitar el otro lado del mundo? Con menos de lo que cuesta la nueva reliquia de Apple te alcanza perfecto (y te sobra) para un vuelo redondo a Japón. Y no, no es ninguna falsa promo, comprobamos que en cierta aerolínea mexicana hay boletos redondos en 15,945 pesos.
Vacaciones todo pagado
Tan sólo con lo que cuesta el iPhone 8 te vas una semanita a Acapulco, te hospedas en un hotel 5 estrellas con comidas y desayunos incluidos (el paquete para dos personas con vuelo lo encuentras desde 5 mil pesos). El otro plan son 4 días en un exclusivo hotel 5 estrellas de Cancún con un plan todo incluido desayuno, comida, cena, bebidas y actividades.
Un autoooo
Bueno, no, no te alcanza para un auto nuevo, pero sí para dar el enganche de un coche sedán, básico, para andar en la ciudad y que ya no te quejes del Metro… y dediques tu odio al tráfico interminable de cada día.