Una inexperta maestra es contratada como profesora de un grupo de chicos difíciles, cada uno de los cuales es un problema social en sí mismo. Pero, aunque la tarea es difícil y la rigidez de la dirección del centro no ayuda, la voluntariosa maestra intentará que los chicos lleguen a graduarse.

Conflictos entre profesores bienintencionados y estudiantes con poco futuro académico para un anodino drama de guión excesivamente convencional. Con tanta moralina final como pocas sorpresas, destaca el correcto trabajo de la profesora.

Desesperada por llegar a los estudiantes, LouAnne prepara ejercicios de clase que enseñan principios similares a la obra prescrita, pero utilizando temas y lenguaje que atraen a los pícaros estudiantes. Ella también trata de motivarlos, dándoles todo un grado A desde el comienzo del año, argumentando que lo único que se requiere de ellos es que lo mantengan.

LouAnne premia a los estudiantes abundantemente, utilizando barras de caramelo y un viaje a un parque de atracciones. Sus métodos atraen la ira de las autoridades escolares, que tratan de obligarla a permanecer dentro del plan de estudios.

Al final del año, la profesora anuncia a la clase que no seguirá enseñando en la escuela, lo que promueve una muestra desenfrenada de emoción de los estudiantes que se niegan a dejarla ir. Conmovida, ella decide quedarse. Una muy buena película que no puedes dejar de ver y compartir con toda tu familia.